En su primera fase (2016), la estrategia contempla definir un portafolio de 26 proyectos tipo para construcción y dotación, que incluyen metodologías, guías, e instrumentos técnicos y legales estandarizados (pliegos de condiciones, términos de referencia, y contratos). En su segunda fase (2017), la estrategia contempla 16 proyectos tipo adicionales, hasta alcanzar 42. En su tercera fase (2018), se incluyen ocho iniciativas más hasta completar 50 tipologías.
Estos proyectos permitirán a las entidades del orden nacional y territorial:
1. Formular y estructurar proyectos de una manera más rápida y eficiente, y ahorrar costos y tiempos en estudios y diseños;
2. Unificar estándares mínimos de prestación de servicio, dotación y calidad en todo el territorio nacional, en el marco de una política incluyente que permita a los habitantes de todas las regiones del país acceder a bienes públicos en igualdad de condiciones;
3. Ejecutar mejores obras de infraestructura con procesos de contratación más transparentes.
Cada proyecto tipo se ha desarrollado a partir de estándares sectoriales definidos conjuntamente con los ministerios y tendrá los siguientes beneficios:
1. Contribución al cierre de brechas territoriales;
2. Provisión de parámetros mínimos de calidad en la prestación de servicios, acordes con los estándares OCDE;
3. Desarrollo de capacidades técnicas y de información en alcaldías y gobernaciones sobre los beneficios, incentivos y oportunidades que ofrece la estandarización para los procesos de planificación territorial.